Las negociaciones están muy avanzadas con una aerolínea de la zona, que garantizaría tarifas de bajo coste. El primer destino regular previsto será con Rumanía ante la demanda potencial existente.

Aun no se conoce el nombre de la aerolinea, pero podria ser WizzAir o BlueAir, compañias de bajo coste las cuales en 2007 fueron situadas como candidatas a ofrecer sus servicios en Zaragoza.

El número de líneas y sus fechas de implantación se deben concretar aún con los directivos, aunque las citadas fuentes dieron por hecho que el primer destino regular será con Rumanía ante la demanda potencial existente.

Los avances en la negociación se debatieron ayer en el consejo de administración de la sociedad, donde participaron representantes de la DGA y de los grupos de gobierno y la oposición municipal. La ampliación de la oferta será sustancial, especialmente por el hecho de abrir el mercado del este de Europa. En esa zona mantienen negocios empresarios aragoneses que han decidido diversificar su actividad, por lo que se atendería una de las reclamaciones históricas de la propia clase empresarial: disponer de destinos de negocios en un aeropuerto que tradicionalmente ha reducido su oferta a vuelos turísticos. En este caso, estarían acompañados por una previsible demanda de extranjeros que por motivos laborables emigraron a España.

La pretensión de la promotora del aeropuerto es diversificar la oferta de rutas comerciales y el riesgo, dado que la dependencia de Ryanair es casi total a la hora de hacer un balance de operaciones y pasajeros. Fuentes oficiales señalaron que los contactos se han centrado en la citada compañía del este de Europa y negaron que existan con Vueling, cuyo presidente, Josep Piqué, se mostró abierto en una reciente declaración. "Hubo negociaciones en su día, pero ahora no hay nada de nada", añadieron.

La sociedad promotora del aeropuerto cuenta con un presupuesto de siete millones de euros, aportado a partes iguales por el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Zaragoza, para apoyar a las compañías que operan en la ciudad. La irlandesa Ryanair y la valenciana Air Nostrum se llevan el grueso mediante contratos de publicidad que cumplen con la normativa en materia de competencia de la UE. La irrupción de esta tercera aerolínea obligará a replantear el programa.

Fuente: Heraldo de Aragon