Airokay

Una empresa aragonesa ha puesto en marcha, con capital privado, un servicio de vuelos personalizados desde los aeropuertos de la Comunidad. Destino y fechas: las que elija el viajero. Se trata de Airokay, y busca ocupar el hueco que existe entre los vuelos comerciales, tan escasos en Aragón, y la aviación ejecutiva, inaccesible para la mayoría de los bolsillos.

“La idea es ofrecer desplazamientos cómodos y económicos desde Aragón a otras ciudades que requieren mucho tiempo por tren o carretera, y a islas como Ibiza o Mallorca”, explica su responsable, José María Amoedo. A su juicio, buena parte del noroeste del país está mal comunicado, sin líneas de AVE y con desplazamientos largos -de más de tres horas- que dificultan la movilidad.

De ahí que su apuesta pase por ofrecer los mismos trayectos “en apenas 45 minutos” y sin las largas esperas previas en el aeropuerto. Para ello cuenta con la colaboración de empresas como Aerodynamics -de Málaga- y Aviationgroup, y con cuatro aeronaves: dos turbohélices y dos jets, uno de ellos propiedad del actor Antonio Banderas.

Como explica Amoedo, muchos famosos que cuentan con un jet optan por cederlo, cuando no lo usan, a este tipo de empresas, con el fin de reducir los prohibitivos costes de mantenimiento que requieren este tipo de aviones. De ahí que hoy en día cualquiera que se anime pueda disfrutar de un placentero vuelo emulando al actor malagueño.

Eso sí, “el precio de los vuelos en jet suele ser más caro”, explica este empresario aragonés, “pero el de los turbohélices es muy económico”. Por ejemplo, un viaje a Ibiza para siete personas puede salir por 1.000 euros, menos de 150 euros por viajero, por un vuelo directo, a la carta, y sin esperas.

“La operativa es muy sencilla: se elige salida, destino, día y hora a través de la web y se indica el número de personas que viajan. El programa valora según disponibilidad, alcance y ocupación de aeronave y aeropuertos mandando la valoración del vuelo. Es tan flexible, que nos permite viajes a la carta difíciles de superar en comodidad y precio”, explica Amoedo, que espera alcanzar todo su potencial de negocio en Aragón en 2016.

Los viajes pueden partir desde los aeropuertos de Zaragoza, Huesca y Teruel, aunque en los dos últimos mediante despegues y aterrizajes visuales -no hay personal en sus instalaciones para hacerlos instrumentales-, por lo que se deben dar unas condiciones mínimas de visibilidad.

FUENTE Y FOTO: Heraldo de Aragón